La cadena china de ropa online SHEIN ha sido acusada por las autoridades francesas de vender muñecos hinchables sospechosos de contener pornografía infantil, lo que ha obligado a la empresa a suspender la venta de estos productos en varios países. La fiscalía francesa también ha iniciado una investigación. Además, los planes de SHEIN de abrir una tienda en unos grandes almacenes parisinos han generado fuertes críticas, con una creciente oposición en Francia.
Según la AFP, la suspensión de la venta de muñecos hinchables de SHEIN no se limita a Francia, sino que se aplicará a nivel mundial. La Dirección General de Competencia, Consumo y Prevención del Fraude (DGCCRF) francesa declaró el 1 de noviembre que SHEIN vendía „muñecos que se asemejan a niños“ y advirtió que „podrían contener pornografía infantil“.
Tras la declaración de la DGCCRF, SHEIN anunció de inmediato la suspensión de la venta de estos productos e inició una investigación interna. Sin embargo, el ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, declaró que si SHEIN reanudaba las ventas, sería „prohibida en el mercado francés“, una declaración que generó críticas aún más intensas. Finalmente, SHEIN decidió prohibir por completo la venta de estos productos.
La fiscalía de París ha abierto una investigación contra SHEIN y AliExpress, otra plataforma china de compras en línea, por la presunta distribución de pornografía infantil. Según la legislación francesa, la distribución de pornografía infantil (incluida la distribución electrónica) es ilegal y se castiga con hasta siete años de prisión y una multa de 100.000 euros.
Recientemente, Francia ha intensificado su lucha contra la pornografía infantil. Por ejemplo, un alto cargo de la Federación Japonesa de Fútbol (JFA) fue condenado por visualizar pornografía infantil en un avión. El Alto Comisionado francés para la Infancia, El-Héri, señaló que „los pedófilos utilizan este tipo de muñecos para ‚practicar'“. El-Héri abogó por que la compra de estos muñecos hinchables también se investigue como posesión de pornografía infantil.
Además, el plan de SHEIN de abrir una tienda en los grandes almacenes BHV de París el 5 de noviembre, una institución con larga trayectoria, ha generado una fuerte oposición en Francia. Los críticos argumentan que los modelos de consumo a gran escala como el de SHEIN, basados en la moda ultrarrápida, no solo reducen el espacio para la industria de la moda tradicional en Europa, sino que también suscitan preocupación por la contaminación ambiental y la protección de los derechos laborales.